Celos patológicos


Si los celos están bajo control, no son patológicos. 

En ocasiones se desbordan y llegan a interferir en la vida de quienes los sufren y de sus parejas. 
Sus síntomas son muy similares a los de la ansiedad, a los del enfado y a los de la tristeza, causando un horrible malestar a la persona que los padece. Y llevando a realizar constantes conductas de comprobación, con una estructura ritualista. 

Un psicólogo cognitivo-conductual te ayudará a descubrir si son patológicos o no.